lunes, julio 10, 2006

¿Completo?

Me propongo, ahora, mostrar un poco de un nuevo paradigma (en el que he estado involucrado).

Cuando decimos que tocamos algo, ¿A qué nos referimos?
Si no malentiendo, creo que decimos que tocamos algo cuando a través de nuestro sentido del tacto percibimos que nuestro cuerpo entra en contacto con un objeto. Claro, que entonces hay que decir qué significa "entrar en contacto un objeto con otro". ¿Qué es lo primero que les viene respecto de eso? ¿No es, acaso, la idea de que no hay distancia física entre un objeto y otro? (con otras palabras, claro, pero en esa dirección pienso que la gran mayoría respondería.
Ahora: ¿es cierto eso? ¿Es cierto que puede no haber distancia (o sea: hay distancia cero, 0, nada) entre dos objetos?. Creo que alguno, con esto, habrá captado algo de lo que quiero decir.
Observando la estructura de un átomo (un núcleo en el centro, protones por algún lugar, y electrones en quién sabe dónde -realmente, no se puede hoy en día decir con 100% de certeza dónde está o va a estar un electrón) vemos que hay mucha distancia entre los objetos que lo componen.
Cambiando la óptica: Veamos nuestro sistema solar, o en general el espacio en que se mueven los cuerpos celestes. ¿Diríamos que hay más espacio que materia? Sin embargo, al tener los pies en la tierra, la proximidad de ésta nos hace olvidar de la respuesta correcta a la pregunta.
Imagínense, todo lo vemos así, desde lo que pensamos (conciente e inconcientemente), hasta lo que pensamos sobre lo que pensamos, y lo que pensamos sobre la forma en que pensamos.

Parece que partiéramos de un paradigma: Lo que ahora sé es seguro, 100% comprobado. ¿Somos tan ingenuos?

Pasa que para ver de forma distinta, entre otras cosas, se necesita verdadera humildad (reconocer que no sabemos, que estamos caminando a ciegas). También se necesitan huevos (coraje, para animarse a salir del hábito establecido). Y otras cosas más.

¿Se entendió un poco el paradigma que quiero mostrar? ¿Alguien quiere pensar junto conmigo ese paradigma? Sino, sigo pensándolo solo, no hay problema (para pensar no necesito del otro. Al otro lo necesito para tener un espejo delante mío).

Suficiente por hoy.

6 comentarios:

Angel y Demonio dijo...

Creo que siempre estamos en contacto con todo lo que nos rodea en mayor o menor intensidad. Digo, el aire nos rodea a todos, no? Tal vez si toco algo no voy a estar 100% en "contacto", pero algo hay!

El asunto va en los límites. Hablas de "distancia 0", y otras cosas (por cierto, noto que eres bastante visual y tactil) lo que me recuerda una vez mas la necesidad que todos tenemos de establecer cosas, de tener seguridades en un universo donde creo que no hay ninguna realmente.

Límites... sabías que eso es también una especie de ilusión óptica? Algo que nuestro cerebro busca y hace para que no nos sintamos "perdidos". Un ejemplo, cuando estás en la nieve y cae una nevada es cuando más posibilidades tienes de desorientarte y perderte, porque tus ojos no "ven" límites, sólo un blanco infinito. (ceguera blanca creo que le llaman)

Podemos asegurar que el cielo se une al perfil de la montaña a lo lejos efectivamente? O sólo lo vemos así? Somos unas maquinitas de lo más curiosas los humanos...

Ya, llego hasta aquí nomás, espero que hayas podido entender algo mi idea, mira que es harto complicado de explicar y a veces me tupo. Saludos!

Diego dijo...

Angel y Demonio:
En mi post no me enfoqué en si estamos en mayor o menor medida en contacto con algo, tampoco en los límites, ni en la búsqueda de seguridad.
En el título, la primera oración, y las últimas 2 o 3 oraciones del post estaba aquello en lo que yo quería centrar la atención.

Como dijo Lacan: no hay relación sexual.
Pero uno persiste.

Suerte,
Diego.

Angel y Demonio dijo...

:) Pues olvida lo dicho entonces... (me callo la boca, me la calloooo!) Saludos!

Anónimo dijo...

Cuando tocamos algo, al igual que cuando conocemos de manera racionalista en su sentido ortodoxo, hay un vínculo entre un sujeto y un objeto, no entre dos objetos. Cabría analizar ese sujeto y su mundo, creo que es el camino a tomar, ya que ese "mundo" que pretendemos entender está construido por el sujeto y, más precisamente, por su lenguaje.

tomatita dijo...

Creo que demasiado análisis fríe las neuronas, realmente lo analizas todo? Por lo que he visto en tu blog sí.
Y discúlpame si te confieso- y esto es por defecto profesional, soy de letras puras y el pensamiento abstracto me deshace el estómago- que roza lo hilarante.
De todas formas, y como buena testaruda, creo que continuaré husmeando entre tus relatos, a ver qué saco en conclusión.
Un saludo.

Diego dijo...

Tomatita:

Creo que demasiado análisis fríe las neuronas, realmente lo analizas todo? Por lo que he visto en tu blog sí.
Demasiado análisis agota, sí. ¿Lo analizo todo? ¿Todo qué? ¿Todo lo que pasa por qué parte de mí? Digo, la conciencia se enfoca en algo, y uno analiza, pero nuestra conciencia no es tan amplia como para abarcar todo. Pero sí: analizo todo lo que pasa por mi conciencia, o al menos eso creo.
Tengo un blog de poesías, si te interesa (como para que no me ubiques en uno de los extremos mente/sentimiento): "Mi Agua"

Y discúlpame si te confieso- y esto es por defecto profesional, soy de letras puras y el pensamiento abstracto me deshace el estómago- que roza lo hilarante.
De todas formas, y como buena testaruda, creo que continuaré husmeando entre tus relatos, a ver qué saco en conclusión.


Lo esencial también es invisible a las palabras (además de a los ojos).


Un saludo.

Un saludo para tí,
Suerte,
Diego.