sábado, junio 09, 2007

Ocultar el resplandor - Tao Te Ching

...
El cielo dura eternamente, la tierra permanece.
Eternos y permanentes porque no viven para sí mismos.
Por eso son eternos y duraderos.

Es así que el hombre sabio,
al ponerse en el último lugar, es el primero.
No pensando en sí mismo, se mantiene.
No buscando su bien, lo realiza.
...


Esas dos fueron estrofas de la obra Tao Te Ching, atribuida a Lao-Tse.

Es bueno aprender a ser como la hoja de una planta, por la cual se desliza una gota de rocío que, con el tiempo, perfora a la roca.

¡Adelante!

2 comentarios:

Angel y Demonio dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Angel y Demonio dijo...

Nada permanece, salvo lo que no nos pertenece.

Todos somos humanos, y por tanto, un "saco de ego", del cual cuesta desprenderse. Es una tarea diaria.

Hay quienes dicen que es una misión imposible, una utopía. Yo creo que es posible, si bien no de forma permanente ... algunos somos demasiado humanos.

Cuanto puedes avanzar por el camino amarillo sin agotar fuerzas? Se puede, pero el andar es lento ... y a veces es necesrio sentarse a una orilla del camino a reflexionar.

Besos.